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Las materias competentes evaluadas por el Icfes son matemáticas, lectura crítica, Ciencias Naturales, Sociales y ciudadanas. Bucaramanga es primera con 36,2% de competencias alcanzadas.

Fotografía: Tomada del ICFES

Desde el año 2016 el Instituto Colombiano para la Evaluación de la Educación- ICFES- estandarizó cuatro competencias para ser evaluadas en el país (matemáticas, lectura crítica, Ciencias Naturales, Sociales y ciudadanas), y hacerles un seguimiento.

Desde ese tiempo y hasta el último corte del año 2019, los estudiantes bachilleres de colegios de Bucaramanga y Bogotá han tenido un importante rendimiento frente a estas competencias determinadas por el ICFES.

Según el observatorio de Realidades Educativas del Valle, en esta evaluación nacional Bucaramanga con 36,2% y Bogotá con 28,1 %  fueron las ciudades de mayor alcance de porcentaje, en competencias evaluadas.

Le sigue en esta estadística Cali con 24,7%, Barranquilla con 21,5% y Medellín con 19,1% con competencias evaluadas.

Según las cifras, el porcentaje del año 2019 en Colombia fue de 18,2 % lo que equivale a manifestar que 564.709 estudiantes aprobaron las cuatro (4) competencias.

El estudio fue concebido a través de un análisis detallado de las pruebas Saber 11. Este ejercicio, que trasciende los reportes tradicionales de análisis de pruebas de Estado, permite ver el nivel de desempeño de los estudiantes de los municipios evaluados en relación a cada una de las competencias evaluadas por el ICFES: matemáticas, ciencias, lectura y sociales.

La información del observatorio Realidades Educativas del Valle cobra importancia en tanto permite conocer las condiciones con las cuales los estudiantes de la educación media cuentan de cara a su inserción a la educación superior y habilidades dirigidas a la resolución de problemas propios de la vida cotidiana.

Este estudio también permite analizar el desempeño de los estudiantes en instituciones oficiales y no oficiales, lo que genera alertas para los tomadores de decisión, en tanto revela que se requieren mayores esfuerzos para poner en marcha estrategias basadas en evidencias para fortalecer los aprendizajes de los estudiantes.

Por: Édgar A. Sánchez

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