El Programa ‘Crecimiento Verde Ciudad Biodiversa’ tiene como uno de sus pilares el fortalecimiento de la estructura ecológica, que consiste en sembrar especies de plantas nativas en lugares estratégicos que garantizan servicios ecosistémicos, indispensables para mejorar la calidad de vida de nuestra fauna, del aire y conservación del agua.
Mediante un estudio, que se realizó hace varios años, se descubrieron tipos de plantas endémicas (son aquellas que solo se dan en una zona determinada, debido a las características geográficas de la misma y que no se pueden encontrar en ningún otro lugar) en los Cerros Orientales de Bucaramanga y su escarpa. Son aproximadamente 100 especies nativas.
Dichas especies no solo le aportan grandes beneficios a la naturaleza, como la regulación del clima, ofrecen sombra y protegen el suelo, además de ayudar en la generación de oxígeno y la disminución de partículas contaminantes; también sirven como fuente de alimento para mariposas, abejas y polinizadores, entre otros animales.
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Nombres de las plantas endémicas
Cabe aclarar que no requieren de cuidados humanos, es decir, se adaptan perfectamente a los diferentes cambios de climas. En ellas podemos encontrar Mano de Oso, Caracolí, Trompillo, Ortiga de Caballo y Caña Amarga, entre otras. Estas plantas las podemos encontrar en tres clasificaciones: ornamentales, arbustivas y forestales.
Este gran tesoro verde es aprovechado por especialistas de la Subsecretaría del Medio Ambiente de la Alcaldía de Bucaramanga, quienes, después de una ardua inspección, recogen las semillas de las plantas, las llevan al vivero, que está ubicado El Carrasco, y allí son cuidadas y germinadas.
Una vez que ya han crecido, son suministradas a diferentes proyectos verdes que se tienen en la ciudad, además de ser enviadas a diferentes viveros en la ‘La Bonita’ para que los ciudadanos puedan tenerlas en sus hogares y así seguir cultivando un tesoro que solo nace en nuestra tierra.
Por: Jadi Valentina Carreño Torres